Ir al contenido principal

"CRÓNICA DE UNA SEÑORA" RAÚL DE LA TORRE (1971)

 INÚTIL REBELDÍA.

Al referirme al cine de Raúl de la Torre,expresé oportunamente, que su mayor logro consiste en el adentrarse en el análisis del mundo femenino de la clase media y que entre 1971 y 1976 concebirá un tridente fílmico que será lo más logrado de su cinematografía. Quizá solo igualado, con posterioridad en "El infierno tan temido"(1980). Dicho tridente se inicia con la película en la que hará foco este artículo: "Crónica de una señora" (1971). 

En rigor de verdad esta película tiene una diferencia fundamental con las otras dos: "Heroina" y "Sola" ya que en ella el director abandona el habitus propio de la  clase media argentina y opta por una protagonista, Fina;  emergente de la clase alta.

Protagonizada por Graciela Borges, Mercedes Sombra, Lautaro Murúa y Federico Luppi sobre la base de la  obra de teatro "La margarita es una flor" de María Luisa Bemberg. La propuesta cinematográfica  muestra una doble naturaleza, ya que su estilo es eminentemente teatral y constituye un pretendido alegato a una militancia feminista obvia de la autora.

"Crónica de una señora" se centra en el inesperado suicidio de una amiga de la protagonista y la crisis personal que el hecho precipita en ella.



Esta crisis personal  tiene su base en las similitudes de la vida que llevaban adelante ambas amigas. Una vida que desde los cánones culturales clásicos de un campo de élite debiera haber sido completa y cercana a la felicidad. 

La toma de conciencia de esas similitudes, por parte de la protagonista, es lo que origina en Fina ese replanteo profundo.

Un replanteo que le permite visibilizar el siniestro microcosmos social del que forma parte y el lugar que ella ocupa dentro de ese orden establecido. Un lugar negador de cualquier esencia de sujeto y que la reduce  a ser un simple ornamento en un círculo perverso conformado por: el marido (Lautaro Murúa), los hijos y el hogar. Circularidad perversa en la medida que la sumerge, de manera sistemática en un tiempo eterno destinado a tareas improductivas.

El proceso que inicia la protagonista de descubrimiento y valoración de su propia identidad y la consecuente negación de una identidad femenina diseñada para su clase social la lleva a rebelarse: Pero mientras más avanza en ese proceso básico de toma de conciencia se irá sumergiendo en una soledad mayor y en clima absolutamente claustrofóbico.


En la propuesta de De la Torre este proceso de rebeldías menores y, como tal inútiles, se observa en una serie de indicadores: el inicio de una aventura amorosa con el personaje que encarna Federico Luppi, que lejos de ser vital en la conformación de una categoría de sujeto de Fina la posicionará como un mero objeto sexual. El menosprecio del marido ante el planteo de querer insertarse en el mundo laboral y el marcado enfrentamiento con su madre que adquiere los ribetes clásicos del melodrama de reacción tardía para con el sojuzgamiento que determina "el deber ser" de la clase de pertenencia.

De la Torre opta por imprimir un ritmo lento al desarrollo de la historia que se manifiesta en un marcado contraste entre la intensidad de los diálogos y una cámara que se detiene en objetos de la escenografía y por la utilización de banda sonora en momentos cruciales, en los que se esperaría la existencia de parlamentos.


Sin dudas lo más destacable de la película es la labor de Graciela Borges que se apropia de esa mujer enjaulada, tanto es así que las mejores escenas son, justamente, las correspondientes a los momentos en que está a solas con su personaje.

Podría decirse que "Crónica de una señora" es la historia del despertar y toma de conciencia de una mujer frente a ella misma y ante el mundo y un intento de reivindicación que sin embargo no sale de lo básico, previsible y, hasta por momentos, banal.

El final de la historia resulta interesante de analizar;  ya que concluye con una situación que volverá a colocar a Fina contra las cuerdas de un nuevo replanteo cuando creía que su resurgimiento como mujer había tenido lugar en base a esa relación extra matrimonial. Una relación donde su habitus vuelve a jugarle una mala pasada al concebir la misma como una historia de amor y descubrir que, sin saberlo siguió en el mismo camino que su amiga quien también fuera amante del mismo hombre hasta su suicidio.

Desde lo técnico esa escena final constituye el mayor acierto del cineasta ya que plantea un final abierto (no habitual en el cine del momento) rodado íntegramente en un plano general que sirve para dar cuenta que Fina sigue siendo un mero ornamento en un escenario diferente al original.

Sin dudas el pretendido feminismo que plantea la historia, como todo el que tiene el sello Bemberg, no es más que una reafirmación de un status quo que no produce quiebre alguna con el paradigma patriarcal y la propuesta de De laTorre es absolutamente funcional con ese feminismo de jardín de infantes.

Para el momento de su filmación sin dudas fue una propuesta innovadora. Pero difícilmente pueda considerársela de avanzada ya que al no ahondar en cuestiones más profundas  no supera determinados clichés propios de una burguesía pseudo revolucionaria.



Comentarios

Entradas más populares de este blog

DAVID STIVEL. "LOS HEREDEROS" (1970)

  LA FUERZA DE UN CLAN. Dentro del universo cinematográfico argentino hay una enorme variedad de directores con propuestas diversas, con orígenes diferentes que se plasman en el estilo de lenguaje fílmico utilizado y las temáticas abordadas. Ese universo, quizás por caprichos propios de un  fomento disímil  del hacer cinematográfico en nuestro país, no sigue el simple silogismo de equipar  calidad con cantidad de producciones.  Así, a poco de plantear un análisis integral, encontramos que el director con mayor cantidad de filmes en su haber rara vez consiguió un producto mïnimamente aceptable; como así tampoco definir un estilo propio.  En contraposición con lo anterior existe un nutrido grupo de directores que sus óperas primas se constituyeron en óperas únicas de manera casi inexplicable y que ese hecho no guarda relación alguna con su capacidad artística. Dentro de ese grupo no puede obviarse a David Stivel .   Reconocido como un director de vanguar...

TRES VECES ANA- DAVID JOSÉ KOHON- (1961)

  ¿VERDADES DISTINTAS ... O UNA MENTIRA?  Continuando con los directores que producen un quiebre cuasi revolucionario, en término de tratamiento fílmico y provocaciones argumentales, durante los años 60; no puede estar ausente dedicar algún espacio a otro director no valorado en toda su magnitud por la crítica. Me refiero a David José Kohon.   Definitivamente exponente del mejor cine de los años 60, se caracterizará por sus provocaciones argumentales y retratar el sin sentido de la vida urbana para muchas juventudes de los sesenta. Tal como lo hace Kuhn resulta interesante analizar a estos directores en clave de la  incipiente conceptualización que hacen de la existencia de diversas juventudes, y como esa existencia está relacionada con las posibilidades de moratoria social que otorga cada clase social. El cine de Kohn es, sin lugar a dudas, un cine de clase media.  En este articulo me dedicaré al análisis de "Tres veces Ana" de 1961. Protagonizada por actores e...

"BOQUITAS PINTADAS" - LEOPOLDO TORRE NILSSON (1974)

  HIPOCRESÍA MAQU ILLADA. En el mundo del cine es bastante frecuente la adaptación de obras literarias de grandes autores al lenguaje cinematográfico. Algunas de ellas resultan demasiado complejas por el estilo de la obras literaria base y, muchas veces, esto determina que los filmes no logren la potencia de la novela original. Solo a modo de ejemplo puedo mencionar "Circe" (Manuel Antìn 1964) o "A puerta cerrada" (Pedro Escudero  ( 1962) . Como contra cara  de lo antedicho hay un grupo de dramaturgos que tienen una pluma mucho mas visual; sin dudas el primer lugar en este grupo lo ocupa Manuel Puig. En este artículo me encargaré de adentrarme en dos figuras: el propio Puig y Torre Nilsson; quienes cuentan con asombrosos puntos en común en su quehacer artístico y para ello haré foco en el análisis de "Boquitas Pintadas" (1974). El primer indicador de regularidades entre ambos lo podemos encontrar en sus propias manifestaciones en diversas entrevistas. Mien...